A la hora de ubicar la vivienda, se tuvo en cuenta el desnivel del terreno respecto a la rasante de la calle, así como la orientación óptima respecto al sol. Se optó por realizar la edificación en dos niveles, uno primero, de acceso desde la calle, donde se sitúa el garaje, y un segundo nivel, a 1,5 m. por encima, donde se sitúa la vivienda propiamente dicha, a la cual se accede o a través del garaje o a por un pequeño patio de entrada, también en dos niveles.

Se optó por una configuración de la edificación girada respecto a los linderos y con doble orientación, más abierta en la fachada sur, y más opaca en la norte, que es a su vez la de acceso. La organización exterior acusa este dualismo, con apertura de grandes huecos en la fachada meridional, siendo éstos más reducidos en la vertiente norte. A todo ello se suma la creación de tres espacios diferenciados alrededor de la vivienda, uno de acceso a cota de la carretera, otro superior a nivel de planta baja de vivienda en su frente a la calle y un tercero interior, situado en la zona más soleada.

El núcleo de comunicaciones vertical de la vivienda se encuentra en la fachada norte. El acceso se realiza por planta baja entrando por el jardín pero también se localiza uno secundario por el garaje y la cocina.